martes, 10 de septiembre de 2013

Juntando Polvo

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¡Qué título exacto para los proyectos que nunca concluí!

Releyendo la entrada anterior, ese soplo casi divino de inspiración efímera, me hizo rememorar la cantidad de proyectos, en su mayoría fics, que he abrazado con locura enfermiza y abandonado con total desapego. Cuando llegaron a mí los recibí con alegría y verdadero entusiasmo: Las ideas comenzaban a remolinarse en mi cabeza y deseaban hacerse visibles. Me sentaba y escribía. Incluso, la imaginación volaba más allá y mostraban el posible final alternativo de la historia, aunque todavía no se supiera con exactitud cómo se llegó a él.

Pero así como llegaban las ideas y el entusiasmo, se iban. Semanas después ya nada existía. Pasaban a convertirse en archivos de Word olvidados y mezclados con los proyectos finalizados o en proceso de construcción. Recurrí, en un vano intento por salvarlos, he sacar pequeños fragmentos a la luz y compartirlos para ver si la idea primigenia, aquella que hacia a mi corazón bailar, volvía y me arrasaba.

Seguramente lo mismo pasará con el fic de la entrada anterior. La realidad es que comenzó como un proyecto propio, luego que me dejará seducir por la idea de las Valquirias/Valkirias (aunque lo único de ellas es una leve esencia y un tatuaje en forma de ala). Se trata de un mundo distópico. De ese proyecto escribí unas tres páginas del primer capítulo, pero ya no existe. Está perdido dentro de la compu. Un profesional podría recuperar el archivo. Yo no. La computadora, la misma que estoy utilizando en estos momentos para hacer la corriente entrada, tuvo que ser formateada por su lentitud y, aunque se quiso recuperar las pocas cosas guardadas, todo se perdió.

Tratando de recuperar algo de ese proyecto perdido, y apelando a la memoria, escribí en un borrador de mi correo lo que ustedes leyeron. Lo pasé a fic pensando que así lograría volver a seducirme la historia y podría tener un merecido final.

Hasta ahora un sólo proyecto rompió el círculo: "Chantaje".  Su llegada fue igual, y la emoción tanta (como en cada proyecto que imagino) que lo compartí en mi Facebook. Lo único en mi haber era el prefacio y las ganas, pero no sabría sí podría continuarlo. La aceptación de esas primeras líneas fue buena. No sólo aceptaron la historia sino también me alentaban a seguirla. Así "Chantaje" vio la luz. Su final pudo ser como el de muchos proyectos que han pasado al olvido, que algunas veces vuelvo a abrir y releo, pero él salió airoso.

Hoy, dicho fic está en su recta final. Que se encuentre colgado en Fanfiction y los ánimos y deseos de los fieles lectores ha hecho posible que llegara a donde está.

"Chantaje" es mi anomalía y estoy orgullosa de él. ¿Por qué? Porque he ido creciendo.

lunes, 9 de septiembre de 2013

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Tres.

Dos.

Uno.

Oscuridad.

El foco ubicado en la esquina superior izquierda se prendió. Parte del cuarto quedó sumido bajo la intensa luz roja que el mismo desprendía  Automáticamente el sistema que proporcionaba energía de emergencia se activó. Las bombillas parpadearon unos instantes hasta que la tensión que estaba siendo distribuida a lo largo de toda la fortaleza se estabilizó.

InuYasha golpeó, iracundo, con un certero golpe de sus manos el destartalado teclado de un viejo computador del siglo XXI. El monitor, igual de arcaico y lleno de polvo, marcaba el uno por ciento del progreso. Una décima antes que la energía se cortase había estado a punto de dar con ellos. Siempre contaban con un par de segundos extras —algunas veces incluso un minuto completo— para terminar el proceso de rastreo y guardar la ubicación. Rastrearlos era vital.

Era lo único que los mantenía con vida.

A salvo.

—Están siendo precavidos.

Miroku, uno de los oficiales de turno y encargado del ala oeste, arrastró los pies sobre el piso poroso. Tenía un aspecto cansino, y la tonalidad violácea bajo los chispeantes ojos azules daba cuanta de la magnitud del descontrol producido la noche anterior en la zona que él custodiaba.

—Sessohumaro me envió hasta aquí para verificar si el proceso llegó a completarse; pero tu cara me ha dicho todo lo que necesito saber y trasmitir.

—No estoy de humor para sermones tan largos.

—¿Cuándo tú has estado de humor? Hasta tu hermano es más simpático en ciertas oportunidades. Y Dios sabe a quién nos estamos refiriendo.

—¿No tienes otra cosa que hacer? ¿Alguna persona que molestar? ¿Algo?

—Negativo. Además, Sango salió con el escuadrón.

—¿Por qué no fuiste con ella? Es peligroso que una mujer ande sin protección.

—Tenía cosas que hacer, como verte a ti por ejemplo. Ella está en buenas manos. No iba a permitir que la cuidara alguien por el cual no siento un mínimo de confianza.

Su acompañante se dejó caer en la silla de al lado mientras le daba una rápida mirada a la pantalla. Torció la boca en un gesto de desagrado y se llevó el casero cigarro a los labios. InuYasha arrugó la nariz cuando los perfectos espirales hechos de humo le dieron en el rostro. Detestaba el olor a cigarro. Lo ponía nervioso. Poseía un olfato mucho más sensitivo que el de la clase promedio. Era una maldición mas que una bendición.

—Aleja esa porquería de mí, Miroku. —gruñó, abanicándose con una de sus manos—. Fuma en otro lado, bastardo narcisista. Sabés que esa mierda me ahoga.

Miroku echó la cabeza hacia atrás y rió entre dientes. ¿Bastando narcisista? Menudos amigos llegaba a tener uno. Le dio una nueva pitada al cigarro, más prolongada que la vez anterior, y exhaló el humo a conciencia sobre InuYasha.

—¡Carajo! ¡Qué apagues esa mierda te he dicho!

De un certero manotazo le quitó el cigarrillo de los labios y se lo arrojó el piso. Frenético, lo pisó con la punta del pie unas cuantas veces.

—Hombre, ¡eres un exagerado! ¿Tienes idea cuánto me cuesta conseguir otro de esos?

—Diez minutos como máximo. Es el tiempo que tardas en seducir y meter mano a Yura. Cuando Sango se enteré de cómo los consigues gritaras de verdad.

—No tiene que saberlo. Ninguno es propiedad del otro. —Dijo, pragmático y con un encogimiento de hombros—. La pasamos bien juntos y nos cuidamos mutuamente.

—Díselo a ella.

—¿Es mi culpa ser tan irresistible para las mujeres?

—Porque mejor no te largas de aquí. No tengo deseos de escuchar tus tonterías.

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¿Qué es ésto? Algunos se estarán preguntando. Bien, no tengo la más pálida idea. 

sábado, 6 de julio de 2013

Cómo publicar gratis en Amazon

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Muchos de los que andamos en el mundillo de la literatura, ya sea como simples lectores la mayor parte del tiempo, anhelan poder ver algún libro con su nombre. Tocamos y tocamos cuando puerta de editorial está en nuestro camino con total de que nos den una oportunidad como escritores. No es fácil, casi siempre una termina siendo rechazado. Hay una serie de pautas a tener en cuenta a la hora de presentar un escrito a una editorial, como por ejemplo: Que la misma esté relacionada con la temática del libro en cuestión. 

Por el momento no he intentado presentar nada de mi autoria a una editorial, simplemente porque no tengo otra cosa que fics. Pero estoy comenzando a pensar en embarcarme en proyectos de mi propia y completa creación. He tenido una cuantas ideas, pero no hay llegado muy lejos. Así que debo poner empeño a eso.

En fin, para evitar irme por la ramas, quiero compartir un enlace que una de mis amistades de facebook ha publicado y me ha parecido interesante para todos aquellas persona que recorren este imaginativo pero costoso camino de la escritura. 

Todos saben que Amazon es una gran tienda donde, entre otras cosas, pueden encontrar libros. Así que un blog al final de la nota dejaré el enlace— se tomó el trabajo de realizar un tutorial y explicar cómo es posible que nuestro escrito sea publicado gratuitamente en dicha tienda. Es una buena manera de empezar, y te ahorra la hincharon de la nariz por el golpazo de la puerta.

Les dejo la dirección para que puedan pasar y ver de qué se trata todo esto. Es una buena forma de comenzar a cosechar seguidos. 

http://www.escriberomantica.com/p/como-publicar-en-amazon-tutorial-paso.html

martes, 11 de junio de 2013

Chantaje: Avance del cap XX

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Nota: No todos saben cuál ha sido el motivo por lo que este fic lleva parado cinco meses, en los que pronto serán seis. Mi mundo emocional, mi vida, sufrió un fuerte golpe el 27 de marzo. Los detalles serán dados el día que suba el capítulo. Aquí no me resulta apropiado. Antes de dejar el fragmento quiero que sepan que ésto es lo único del fic que tengo escrito hasta el momento, y lo he escrito en este instante porque la llegada del último review me trajo de vuelta las ganas de reencontrarme con algo que amo. No abandonaré ninguno de mis trabajos. Muchos comprenderán la demora cuando lean el motivo.

Disfruten.

Chantaje
Inuyasha es propiedad de Rumiko Takahashi. La trama de la historia es mí autoría. Prohibida la reproducción completa de la misma.

Summary: "— ¿Aceptas?... Era una simple pregunta, pero en su caso la sentenciaba al mismo infierno; y él era el verdugo que se encargaría de conducirla, de darle el golpe de gracia". AU


Avance: Capítulo XX

Sus ojos descendieron hasta el reloj de pulsera sin detener el tamborileo de sus dedos.

Estaba retrasado.

Con absoluto hermetismo posó su mano sobre la taza declinando el cordial ofrecimiento de la mesera. No era una mala infusión, algo que le resultaba particularmente extraño. Su paladar estaba acostumbrado a las más finas delicias. Y,  aunque aquel café tampoco era el mejor que alguna vez hubiera probado, entraba en la corta lista.

Dedujo que no compartiría su descubrimiento con nadie. Además,  lo hiciere o no, era irrisorio. Nadie de su círculo creería que un pequeño café de la zona este de Tokyo pudiera superar los estándares de la élite.

No sólo la bebida era agradable —la palabra se cargaba de una cierta semántica diferente e insólita que la hacía reír— sino también el ordenado y pequeño local. Al parecer, contaba con un porcentaje de clientela frecuente; lo que daba un aspecto de absoluta afabilidad y buen trato pese a los problemas particulares de ambas partes. En algunas mesas donde la familiaridad era dada por la concurrencia diaria, la atención resultar más cercana. Las sillas se volvían divanes y los meseros confidentes temporarios.

El aroma de las galletas recién horneadas y de las tortas de manzana llenaba la estancia junto al sonido constante de las máquinas de café. Los empleados volaban hasta la barra para acercar los pedidos o cargar en las bandejas las órdenes.

Pensó que el dueño del lugar era estricto a la hora de hablar de pulcritud. Los pisos y el mobiliario brillaban como nuevos, y los trajes que el personal usaba para trabajar estaban impecables.

Allí no había nada que ella pudiera considerar proveniente de su mundo, pero se sintió como en casa; rodeada de sus costosos y finos muebles de estilo y de su ropa de diseñador.

— Lo siento, ¿demoré mucho?

jueves, 6 de junio de 2013

¡Adiós, Don Quijote!

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Aun trato de comprender qué ha pasado.

¿Por qué no estás a mi lado?

Deberías estarlo.

El Egoísmo, el egoísmo, ¡el egoísmo! provoca que te increpe.

Me niego a creer que te has marchado.

Pero lo hiciste.

Fue en silencio.

Tus ojos cerrados.

Mis lágrimas no te retuvieron.

Llanto amargo.

Ahora mutaste.

Centinela eterno.

¿Me observas?

¿Tienes tus parpados levantados?

Me cuidas.

Te extraño.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Amiga

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La vi mover los labios dispuesta a narrarme con puntillosa minuciosidad aquella parte de su vida en la que no estuve a su lado.

¿Conocería su fortaleza? La misma que infinidad de veces en el pasado observé en sus ojos envalentonados. 

Asentí a su relato, dejando que la emoción en su voz llenara mis pensamientos como antaño.

Los recuerdos que ambas compartíamos se agolpaban inconexos en mi mente. Como aquella vez que, abrumada por sus pensamientos, me había buscado con el afán imperioso de escuchar un consejo. 

Aquel diminuto pero proporcionado cuerpo poseía aún la tenacidad admirable que había sobrevivido y mutado con el tiempo.

Nuevamente me pregunté si sería consciente sobre ello.

Entonces, no tuve más que un sólo pensamientos: Mi amiga... mi hermana, aquella niña de bucles dorados, había cumplido sus anhelos. 

lunes, 12 de noviembre de 2012

Chantaje: Avance del cap XIX

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Chantaje
Inuyasha es propiedad de Rumiko Takahashi. La trama de la historia es mí autoría. Prohibida la reproducción completa de la misma.

Summary: "— ¿Aceptas?... Era una simple pregunta, pero en su caso la sentenciaba al mismo infierno; y él era el verdugo que se encargaría de conducirla, de darle el golpe de gracia". AU


Avance: Capítulo XIX

Entonces, Kagome lo supo. Algo andaba mal. La historia que Kaede acababa de terminar de narrar tenía un significado, algo que ella no podía dilucidar. 

¿Cuál era?

— No lo entiendes, ¿verdad, niña?

La mirada preocupada de la vieja niñera le hizo recordar el primer día de su llegada, y aquellas palabras de advertencia que le soltó cuando ambas se encontraban en una de las terrazas.

Aún así continuaba sin poder comprenderlo.

— No.

Kaede guardó un momento de silencio tratando de acomodar los pensamientos que se abrían paso por su mente de manera vertiginosa. Si antes temía por el bienestar de la joven a manos de ese extraño, ahora lo hacia con mayor fervor.  Esta nueva revelación podría destruirla.

Ya estaba muy lejos de poder afirmar lo que él pretendía, pero algo estaba muy claro. Además, los ojos de ese hombre se lo habían confirmado. Así que sólo le restaba rezar a Kami, esperando a que su plegaría fuera escuchada. Esperando que Kagome sea lo suficientemente fuerte como para poder enfrentar el cúmulo de emociones contradictorias que estaban surgiendo en Inuyasha.

Podría consumirla.

Notó la impaciencia y el desconcierto en la mirada de la mujer que aguardaba su respuesta.

—Sólo... ten cuidado —aconsejó sinceramente, deseando con toda su alma que aquello fuera suficiente para poder mantenerla a salvo.
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